martes, 13 de diciembre de 2011

Soy en ti.


Quizás, quizás,
Un corazón roto no valga tu pena,
Una lágrima amarga no cabalgue tu corazón,
Pero me destruyes desde adentro,
Con tu oscuridad y mi poca luz,
Nada me queda.

Ningún santo ha pasado por tal martirio,
Una copa rota no son más que los labios que intento besar,
Un corazón frio es lo que me espera en tu pecho,
Que maldición la mía.

Tal vez las desventuras del tiempo cambien,
Pero algo me dice que seguirá todo igual,
Aferrado a mí sufrimiento espero no sufrir más,
Buscando una salida, espero nunca llegarla a encontrar.

Un delirio estoy viviendo,
En una realidad cada vez más tormentosa,
Un deleite me estoy negando,
De un principio más sano.

¿Qué será aquello?
¿Qué me conmueve por dentro?
¿Qué me hace sentir?
Creo que lo mismo que me hace olvidar.

Un corazón que no es completamente mío,
Un deseo totalmente insatisfecho,
Una obra inconclusa,
Es mi amor por ti,
Es mi deseo de ti,
Es lo que eres mí, 
Es mi  fantasía de lo que soy en ti.

miércoles, 14 de septiembre de 2011

De Amor.



Cada mañana,
Al ver tus ojos,
Sé que estoy vivo,
Pues me invade el amor que siento por ti.

Cada noche,
Al dormirme en tu aroma,
Mi serenidad parece eterna,
Pues sé que sigo contigo.

Cada vez que escucho latir tu corazón,
Me posee un deseo ferviente,
De seguir en tus brazos,
Y nunca abandonar tu calor.

Aunque pasen mil días,
Siempre querré verte a mi lado,
Aunque pasen mil noches,
Siempre querré el sabor de tus labios.

Si supiera que pasara más adelante,
Pediría a Dios olvidarlo,
Para descubrir como una aventura,
Un nuevo día juntos.

Que  las cosas sigan pasando,
Que el cielos estrellado que espía nuestro amor,
Siga creyendo a nuestro encuentro un pecado,
Pero te seguiré hasta el fin.

Tal vez la cosas cambien,
Y envejezcamos
Pero nada me hará cambiar de opinión,
Te amo, y seguiré a tu lado.

Es lo que necesito saber.

Mi Deseo.



Un corazón rebosante de vida,
Un corazón que palpita en amor,
Un pecho que acobija un deseo inmenso,
De hacer el amor con locura y pasión.

Un latir de dorado resplandor,
Que ilumina a tu rededor,
Es un perfume que esparce esperanza,
De lograr la ternura de dormir en tu unión.

Que los besos que regales nunca dejen de ser tuyos,
Que nunca encuentren un sustituto o impostor,
Que las olas de deseo invadan tu esencia,
De buscar y buscar un rayo de sol.

Como la briza que acaricia tu cabello,
Como la luz que quema tu color,
Como aquella sonrisa tan tierna,
Es aquello que quiere mi corazón.

Un suave beso,
Una mansa caricia,
Un tierno deseo,
Que brille tu corazón.

martes, 7 de junio de 2011

Poema a la Destrucción.



Quizás, el caótico orden sea tu sangre,
Las olas tajantes del no ser sean las alas,
La sombra gris sea tu amante,
Y la descomposición tu mirada.

Solo aquello que no cambia es el cambio,
Inducido por ti,
Gestado en tu vientre descompuesto.

Tal vez las horas sean tus testigos,
Y no haya más que memoria en tu infierno,
Infierno causado de risa y delirio,
De ver que cambia todo, que cambia desde adentro.

Pulsos de mutación rebosan a tu paso,
Dejando todo trastornado,
En un cielo azul, muy callado.

Madre de la desfigurada vida,
Quizás hoy seas la causa,
De que aquellas penas que pasan,
No sean más que huellas del alma. 
Desde mi entrañas.