Así como una suave brisa se asoma fugaz,
así siento cuando estoy contigo;
sólo en presencia,
náda de temor por estar.
Simples silencios,
que fecundan poco a poco,
un espacio de inspiración,
donde estamos sin más.
Aromas que son empujadas,
a evocar una belleza antigua,
que se transforma en nueva,
con cada centímetro que te acercas.
La vida se vuelve susurro,
el susurro viento,
el viento una suave brisa,
y todo vuelve a empezar.
Descubro un mundo nuevo cuando te abrazo.